Toda fiesta es un circo con su anfitrión, payasos, domadores, malabaristas y animales feroces. Escogé tu acto favorito.
Felipe Sosa
Mi intención no es etiquetar personas, pero corríjanme si estoy equivocado. Para que una celebración sea completa e inolvidable, existe un rango de invitados. Es sólo cuestión de elegir tu manera de disfrutártela.
Brozo y The Joker son populares, pero no tienen muchos amigos, menos amantes. No es malo ser gracioso y hacer reír a la gente; eso sí, equilibrado. El abuso de chistes o bromas te pueden enrojecer la nariz.
Los party animals gritan, toman y acarician sin límites. Son colegas, así que le dicen “sí” a todo, y se convierten en malabaristas de sus propios excesos. ¡Cuidado!
En los shows de leones, tigres y elefantes, lo emocionante es saber que en cualquier momento alguno puede salirse de control y matar a cualquiera. Así es la situación de algunos fiesteros, que sin quebrarse la cara, al final, no alcanzan su nirvana de felicidad. Podés impactar con esta postura, pero, creeme, una buena vibra te hará cosechar momentos valiosos.
4 horas de party
Sabé cuándo llegar, pero, más importante, cuándo irte. Esto es vital para dejar, ya sea una agradable o terrible impresión.
2 ó 3 lugares diferentes
Si en una actividad no estás pasándotela bien, recapacitá. Tal vez necesitás frecuentar circos diferentes, no los supuestos “populares”.
4 mil canciones
Llevá tu iPod. No sabés en qué momento la fiesta necesitará un cambio de ambientación. Tus gustos musicales pueden ser la salvación.
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